SEXOLOGÍA

 

ACTIVIDADES EN EL AMBITO DE LA SEXOLOGIA

  •  Educación de las sexualidades
  • Asesoramiento sexual / Terapia sexual y de pareja

 

EDUCACION DE LAS SEXUALIDADES

 La educación sexual es la educación de todas las sexualidades y en todos los momentos evolutivos. La educación sexual tiene que contribuir a que los chicos y las chicas aprendan a conocerse, aprendan a aceptarse y aprendan a expresar su erótica de modo que se sientan felices, satisfechos y satisfechas, evitando consecuencias no deseadas.

 Lecturas recomendadas:

“La educación sexual de los hijos” por Félix López Sánchez

“Sexorum Scientia Vulgata” por Joserra Landarraoitajauregi Garai

  

ASESORAMIENTO SEXUAL / TERAPIA SEXUAL Y DE PAREJA

Terapia individual en disfunciones sexuales en la mujer

  •  Deseo hipoactivo de la mujer.

 El trastorno del deseo en las mujeres afecta al 10% de la población. Sus manifestaciones son: poca disposición al encuentro sexual, desinterés al encuentro sexual, aversión al encuentro sexual y anestesia genital.

La causa de esta disfunción puede estar en factores orgánicos y/o factores psicológicos (conflictos de pareja, trastorno del estado anímico, déficit de autoestima, factores estresantes extrínsecos, etc.)

Una adecuada evaluación de las causas del trastorno ha de ser prioritario para realizar una adecuada intervención.

  •  Vaginismo

 El vaginismo es la contracción involuntaria de los músculos que rodean el tercio externo de la vagina, en especial el esfínter vaginal, músculo perineal y elevador del ano, de modo que puede impedir o dificultar la penetración.

Afecta al 2% de las mujeres y el 99 % de ellos son de causa psicógena.

La causa está relacionada con el proceso fóbico a la penetración (asociado al miedo a la penetración).

En la intervención es importante que ambos miembros de la pareja se les explique en qué consiste el problema (diagnóstico) y siempre en la consulta de un/a sexólogo/a acreditado/a como tal. A partir de la evaluación de las causas, a través de entrevistas tanto individuales como en pareja, se les plantea a la pareja la intervención más eficaz a la disfunción.

  •  Dispareunia

 Dispareunia significa “coito doloroso, difícil o malo”. Este problema lo suelen padecer un 2% de las mujeres de forma regular, y mucho mayor de forma ocasional.

La dispareunia se puede presentar al inicio de la penetración, después de la misma y/o durante la penetración.

A diferencia del vaginismo, la mayoría de las causas son orgánicas. Por ello, es importante hacer una evaluación rigurosa de la causa.

  • Anorgasmia

 Cuando el orgasmo no ocurre o está notablemente retrasado es lo que se denomina anorgasmia. Hay diversas maneras de clasificar la anorgasmia y en las cuales no me voy a detener, pero que son de interés para el profesional de la sexología y el trabajo con la disfunción. Las causas pueden ser tanto físicas como psicológicas.

Terapia individual en disfunciones sexuales en el hombre

  •  Deseo hipoactivo

 El deseo hipoactivo en el hombre consiste en la ausenta permanente y persistente de fantasías eróticas y motivación para acceder a las relaciones sexuales.

Hay muchas variables que pueden causar el deseo hipoactivo del hombre, pero podemos incluir: los aspectos orgánicos (edad, enfermedades crónicas, alteraciones hormonales,…) y aspectos psicológicos (ansiedad, estrés, alteraciones del estado de ánimo, conflictos de pareja, …).

Cualquier intervención que tenga como objetivo mejorar el deseo ha de ser precedida por una exhaustiva evaluación, donde la historia clínica sea profunda y bien estructurada a través de entrevistas, cuestionarios, autorregistros y exploración clínica.

El tratamiento del deseo hipoactivo tiene como objetivo fundamental recuperar las fantasías eróticas e incrementar la motivación para acceder al sexo. Existen distintos modelos terapéuticos, en los que no se va a profundizar en este momento. Pero para el éxito de cualquier tratamiento se ha de contar con la motivación de la persona afectada y la colaboración de su pareja.

  •  Disfunción eréctil

             La disfunción eréctil se define como la incapacidad para conseguir o mantener una erección con la suficiente rigidez como para llevar a cabo relaciones sexuales satisfactorias. Este tipo de disfunción es por la que más se consulta junto a la eyaculación precoz dentro del área de la sexología.

Según, Francisco Cabello experto en la materia, siempre hay un componente psicológico, con independencia de que exista una posible causa orgánica originaria, de ahí la importancia de la multidisciplinaridad a la hora de investigar y tratar el proceso, y la poca validez de clasificar la causa de la disfunción en orgánica, psicógena o mixta, dada la dificultad que entraña poder ajustarse de forma simplista a uno de los tres epígrafes.

Para un tratamiento eficaz habría que tener en cuenta los factores predisponentes, precipitantes y mantenedores. Y como en otra disfunción cualquier tipo de intervención ha de ir precedida por una exhaustiva evaluación.

  •  Eyaculación precoz

 La tasa media de la eyaculación precoz se sitúa alrededor del 30% del total de la población masculina. Para la mayoría, hasta hace décadas el asunto no preocupaba demasiado. Pero, a raíz de informes de sexualidad femenina, han hecho que los hombres se sientan responsables de la satisfacción sexual de la mujer. Esta responsabilidad es causa de muchas de las disfunciones sexuales masculinas, el miedo a no durar el tiempo suficiente para que la mujer alcance el orgasmo, a pesar de que la consecución del orgasmo de la mujer no depende tanto del tiempo como de aspectos cualitativos.

Hay muchas formas clínicas y con vistas al tratamiento se diferencian en: Pseudoeyaculador Precoz, E primario/secundario; EP coital/coital y no coital; EP con/sin ansiedad; EP con /sin pareja; EP con pareja con pareja colaboradora/no colaboradora.

  •  Trastornos del orgasmo masculino

 En la sexología se considera trastorno del orgasmo masculino la ausencia de orgasmo con independencia de la presencia o la falta de eyaculación (eyaculación retardada y la aneyaculación).

Las causas pueden ser orgánicas y psicológicas.

En el tratamiento de este trastorno es básicamente a nivel sexológico ya que en la actualidad ningún medicamento ha contribuido a resolver de manera eficaz el problema de la eyaculación retardada o aneyaculación. Salvo en pacientes con lesiones medulares con fines reproductivos.